Friday, October 3, 2008

Ya casi termina...

Esa noche, dormida volvió a soñar con su esposo. Esta vez, al escucharle llamar, corrió hacia la puerta y se le abalanzó tratando de evitar que se esfumase. Con ternura él besó su frente hasta tranquilizarla y cargándola en sus brazos se internaron en el cuarto. Lilah sintió abrir su boca y hasta levantar su brazo al voltear para besarle. Cuando sus labios se toparon con la inerte almohada, despertó. Sintió el ardor en sus mejillas. Ese que cada mes le visitaba acompañado de un hervor que le quemaba ...busca en tu e-mail la parte que continua aquí).

En un año se puede aprender a tocar el rebab, se puede escribir un libro. En un año la barba puede llegar a crecer hasta cubrirte la mandíbula.

Unas astillas de sol de mañana vinieron a despertarme. Se colaron entre las rendijas de las tablas de la ventana y clavándoseme en los parpados me hicieron guiñar los ojos y mover la cabeza para esquivarlas. Al despertar, descubrí que las fiebres me habían abandonado y que la claridad me había vuelto a la testa. Como tantas veces, intenté probar mis piernas y me alegró sentir que excepto por el dolor en la rodilla, podía mover los pies sin mayor dificultad. Traté de incorporarme entonces, sin embargo una fuerte punzada en la cadera me frenó. Volví a recostarme. Examiné el recinto. Paredes de adobe sostenían traviesas de palo, sobre estas, descansando un tejado de forraje seco. En una esquina, una rústica mesa con tres huevos, algunos higos y unas granadas. Debajo varios trozos de leña. A mi izquierda, un jarrón y una palangana, pasando, una frágil cortina que dividía la recamara en dos y en el barrido suelo, una alfombra y algunos cojines. En esto andaba cuando escuché abrirse la puerta. “¡Emir!”

Aprendí que existen gestos, mímicas y señas que pertenecen a un idioma internacional. La mirada complacida, un suspiro de placer, una sonrisa en los labios. Un sí o un no. Su significado es de interpretación universal. Así comenzamos a comunicarnos a partir de mencionar nuestros propios nombres tocándonos el pecho al pronunciarlo. Claro, ella insistía en llamarme Emir, y yo lo consentía. Luego comenzamos a mencionar objetos; silla, mesa, pescado… de ahí, lo más complicado, conjugar verbos, mas, el tiempo estaba a nuestro favor, y la satisfacción por las revelaciones compensaba el esfuerzo, pues fue así, que entre otras cosas, aprendí los relatos del Mulá Nasruddin. Lilah los contaba así:

“Un día la gente de la ciudad invitó al Mulá Nasruddin para que les predicara el sermón. Cuando subió al púlpito, notó que la audiencia no estaba muy entusiasmada, entonces preguntó, ¿Ustedes saben lo que les voy a decir? La audiencia contestó, “No”, entonces el les anunció: “No tengo deseos de hablarle a gente que no tiene ni siquiera una idea de lo que les voy a decir” y se marchó. La gente se fue muy avergonzada y le volvieron a llamar el próximo día. Cuando les hizo la misma pregunta, la gente contesto “Sí” Entonces Mulá Nasruddin les dijo, “Bueno, ya que ustedes saben de lo que les voy a hablar, no les haré perder más de su tiempo”, y se marchó. Esta vez la gente estaba realmente perpleja. Ellos decidieron tratar una vez más, y una vez más invitaron al Mulá para que les predicara la próxima semana. Otra vez les volvió a hacer la misma pregunta – “¿Saben ustedes de lo que les voy a hablar?” Ahora la gente estaba preparada y la mitad de ellos contestaron “Sí” y la otra mitad contestó “No”. Entonces el Mulá Nasruddin dijo: “Bueno siendo así, entonces que la mitad que sabe lo que voy a hablar se lo cuente a la otra mitad que no lo sabe”, y se marchó.”

5 comments:

rz.miguel said...

DIANTRE DUA COMO TE PUEDO DECIR Q ERES BUENO .HAY Q BUSCAR UN EDITOR . NO, NO ME CANSO COMO VA VA A CANSAR LA EXCELENCIA DE TU PLUMA. BRAVO BRAVO.....

rz.miguel said...

dua es un reto pero la coyontura es perfecta un occidental tratando de redimir, una maltrecha mujer de oriente medio, tal vez hasta se pueda utilizar como premonicion de lo que deberia ser el final de la guerra, una alianza de amor como unica salida a este hoyo negro que es la guerra de Irak.Che Juan un mesias? Porque no? Tenemos a Mita y a un Jesucristo ....

Sonia Noemí said...

Que gracioso Mulá Nasruddin .

Tere said...

Eso de Mulá Nasruddin me recuerda cuando Challi me decía "te cuento el cuento del gallo pelón". Una vez me encorille tanto, que challi tuvo que inventarse algo a lo loco para que yo lo dejara quieto. Ja,ja,ja

Dewar said...

Una relación tan extraña pero no imposible. Los seres humanos tenemos más cosas en común de las que a veces pensamos...pero a ver como termina esto. Ya estamos llegando...